PUNTADAS DE UNA ESPERANZA CANSADA

Sentada, rancia, en una mecedora,
lívida, con un ovillo de abismo en la falda,
teje  y teje fatigada con su abrigo de lluvia
de voces pálidas.
Sus manos mueven los ganchillos de
escarcha; un punto de bastilla, una cadeneta
y una nostalgia.
 
Cansada, retira una línea desdibujada
y el viento deshilvana lo poco que se mostraba.
Era una flor bordada con un nombre,
o un sueño tal vez...
Se ha borrado, han volado todos los hilos.
Mientras ella reposa, se deshace todo
lo que un día hubo cosido.


Libro:Sendero de latidos.
Texto de Susana Jiménez Palmera.©

AZUL SILENCIO


Solo los ojos hablan
y el corazón recibe;
no hay lenguas enredadas
ni susurros,
solo emociones que dibujan 
ecos de silencios.

Mudez azulada
que ata un verso de amor limpio,
no hay oraciones
ni voces que increpan;
solo el brillo tenue
de lo que no se ha dicho,
y un suspiro añil
en el que me eternizo.

Se desvanece
lo fugaz en el bullicio
mientras el alma se abriga
con anhelos perpetuos.
Se abrazan la fragancia
de la nada y el todo
en la intimidad
latente de este silencio.



©Texto de Susana Jiménez
Libro Sendero de latidos.



"Liszt Llevó una profunda tristeza en el corazón que de vez en cuando dejaba estallar en sonido"