Es tiempo de evitar nanas
que nieguen la alegría.
Prohibido acunar lo que no pasó,
que no reboten los recuerdos.
Hay permiso
para huír
de ellos.
En la boca, alcohol y humo,
bocanada de olvido
que llega hasta el pecho
y choca.
Trae el silencio del consuelo
y la conciencia
de que el tiempo borra
en la memoria
las horas.
©Texto y fotografía de Susana Jiménez Palmera.